Las clases del profesor Toshiro Kanamori se basan en la educación emocional.
Esta metodología hacer que se cree en el aula un clima de confianza de los
alumnos con el profesor y también entre los propias alumnos.
Las clases hacen que los alumnos muestren aquello que les
preocupa y los miedos que tienen. Hay un clima de tanta confianza que los niños
se cuentan sus problemas sin ningún tipo de miedo. Las emocionas, alegrías, el
miedo, la tristeza, son temas que se tratan en las clases y en las que todos
los alumnos se apoyan.
El profesor ayuda a sus alumnos a ser mejores personas, a
que se esfuercen por lo que quieren y que se muestren al mundo tal como son.
El profesor se preocupa absolutamente por todo lo que les
pasa a sus alumnos, les escucha y les ayudan a que sepan afrontar sus
emociones. Hay una frase al principio del documentar que muestra muy bien la
metodología que utiliza el profesor, y es que les dice que lo que van a
aprender durante el curso es a ser felices.
Esta educación es buena llevarla a cabo porque te permite
conocer a tus alumnos, cuales son sus inquietudes y problemas. La amistad y el
compañerismo se hacen visibles en todas las clases.
Es muy importante trabajar la competencia emocional con los niños. Según mi opinión, a partir de la expresión de las emociones se ayuda a crear una gran estabilidad en el grupo, un buen clima de compañerismo y respeto mutuo, tanto con el maestro, como con el resto los alumnos y con ellos mismos. Creo que es la base principal para que el grupo clase aprenda. La pena es que en nuestro sistema educativo no "hay tiempo" (en el currículo) para trabajar las emociones con los niños...
ResponderEliminarLaura Ruiz García. Grupo 1.
EliminarHe de daros la razón a ambos, pero centrándome en el tema del tiempo en el aula.
ResponderEliminarUn proyecto de tal magnitud no puede realizarse en prácticamente ninguna aula pública, ya que la necesidad de que los alumnos aprendan los contenidos de los cuales van a ser examinados va por delante del tratamiento emocional.